miércoles, 11 de noviembre de 2009

CORRUPCION EN LA BONAERENCE

Una fiscal descubrió la complicidad de altos jefes con piratas del asfalto
Un caso de corrupción policial en gran escala sacude a la cúpula de la bonaerense.
Se suma el mismo a la ola de escándalos que hacen prever un inminente relevo del Ministro de Seguridad, Carlos Stornelli, y del Jefe de Policía, Juan Carlos Paggi.

La semana pasada, la Fiscal de la UFI de Zárate, Andrea Palacios, decidió realizar un allanamiento en un galpón de esa localidad, donde se presumía se iban a encontrar los objetos valiosos recientemente robados en el country El Casco.
Sorpresivamente, se presentaron para dirigir el allanamiento el jefe y subjefe de la Dirección de Investigaciones de Zárate, Comisario Mayor Jorge Lobos y Comisario Inspector Alberto Milano.
El hecho llamó la atención de la Fiscal, porque no es normal que oficiales de alto rango participen de un procedimiento común y corriente.
Allanado el galpón, se detuvo a dos personas y se encontró un importante depósito de mercadería robada por piratas del asfalto.
Palacios pidió de inmediato que le entregaran el celular secuestrado a uno de los delincuentes y, para su sorpresa, Lobos le contestó que ya lo había mandado a la Comisaría para que se analizaran las llamadas.
La Fiscal perdió la paciencia y reclamó que le trajeran el celular de inmediato.
Pero le trajeron un aparato con la memoria vacía.
A todo esto, Palacios había advertido que el otro delincuente detenido había escondido un celular en su bolsillo e hizo que se lo secuestraran.
Al revisar las llamadas efectuadas en las últimas horas vio que se repetía un número que figuraba como “contacto”.
En un clima de gran tensión terminó el allanamiento y, a la mañana siguiente, Lobos pidió licencia.
Resulta ser que el número de “contacto” correspondía a su celular.
A todo esto, la Fiscal habría recibido la información de que, durante el allanamiento, se habría hablado de matarla a ella y a los delincuentes pero que, como no tenían “perros”, es decir, armas truchas para dejar en el lugar, no se animaron a hacerlo.

Lobos se encontraría ligado al cuestionado Superintendente de Investigaciones Carlos Torreira, apodado “el Tony” o “el Ronco”. La investigación abierta por este hecho afectará probablemente a la cúpula policial.

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